Para el mes de marzo se celebra el día de la mujer, y en esta ocasión la organización «Grito de Mujer» ha decidido dedicar su homenaje poético a los niños víctimas de la violencia de género. Este es mi primer poema -denuncia. Se sabe que muchos de los hijos de padres maltratadores se convierten en violentos y llegan a serlo ellos mismos.
Con objeto de la celebración del día de la mujer se han hecho múltiples propuestas de actividades contra la violencia de género. Una de ellas se llama GRITO de MUJER y está organizada desde Centroamérica a nivel internacional. El año pasado participé con el Aula Poética y este año nos han propuesto volver a participar. Yo ya he hecho los dos poemas a los que me comprometí. Uno de ellos se titula SI, y ya está publicado en este blog, y el que ahora subo es el segundo. Trato de ponerle voz al maltratador que escuda su actitud en un amor que él entiende como sublime, y que solo es reflejo del amor posesivo y envenenado.
A veces, confesarse va bien, y eso he intentado con este poema. Suelo tomarme las cosas con cierto sarcasmo, y esta vez no iba a ser distinta.
Siguiendo con el tema de la gastronomía el otro día hice croquetas de cocido, me salieron riquísimas y no tuve más remedio que dedicarles un poema. Aquí va.
La cocina de aburrimiento hace que se inventen cosas con todo lo que haya en la cocina. Un día hice esta receta de mi invención.
Cuando la mañana se presenta lluviosa salen poemas un poco tristones. Hoy ha sido uno de esos días.
Varios días de niebla, últimos días de octubre y ganas de contar.
Hoy he pensado en lo que me queda por delante y todo lo que puede pasar se me heló la mente. No fui capaz de echarlo ni deshelarlo hasta que me surgió el primer verso de estos cuartetos. Imposible dejar de hacerlos y conjurar el pesimismo que me invade algunas tardes.
